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PSICOFONIA

 

Un extraño violinista surgió en la cinta del cassette dejando oir sin parar su enloquecedora melodía

Inglaterra parece ser un lugar ideal para realizar este tipo de experiencias psicofónicas.

MEDIANTE LA PSICOFONÍA SE PUEDEN CAPTAR VOCES QUE SE EXTINGUIERON HACE ANOS Y SUS DUEÑOS SURGEN DURANTE LA GRABACION PSICOFONICA DESDE OTRA DIMENSION-TIEM. PO, EN BUSCA DE UNA COMUNI. CACION CON NOSOTROS.

VOCES QUE REGRESAN DEL MAS ALLA Y SE PRENDEN, MUCHAS VECES, AL IMPROVISADO EPERIMÉN-TADOR DE PSICOFONIAS... MENSAJES, CANTOS Y LAMENTOS QUE LLEGAN EN FORMA EXTRAHU-MANA Y VAN IMPREGNADO CON SU SONIDO, LA SENSIBLE CINTA DE CASSETTE...

IA MUSICA SE ESCUCHABA INTERMITENTE COMO SI SE TRATARA DE UNA FUERZA SOBRENATURAL QUE NO SE PODIA CONTROIAR.

PSICOFONIAS

TENTACION Y PELIGRO

TENTACION Y PELIGRO

Las psicofonias, como aclaramos anteriormente en esta serie fascicular, consisten en grabar voces o sonidos no perceptibles al oído humano por poseer una vibración muy sutil y que se encuentra en octavas muy superiores a las de nuestra percepción normal. Estas voces, algunas veces, dan mensajes que pueden auxiliarnos ante tal o cual conflicto, preavisan peligros, o simplemente se deleitan regresando a los lugares de su antigua existencia.De este mundo de lo invisible, mundo extraño, intermedio, y que reviste peligros, parten voces que fueron humanas alguna vez y hoy regresan desde el «Más Allá»... Un caso verdaderamente aterrador fue el que sucedió en Inglaterra en el año 1976 a Bob Ingham y que fue relatado en diversas publicaciones especializadas en fenómenos para-normales.Bob Ingham, médico psiquíatra inglés, es un hombre de gran cultura general y se interesa por todo aquello que sale de lo común.Su interés por las psicofonías se despertó a raíz del caso presentado por una paciente. La enferma encuestión, mujer de la alta burguesía londinense, había tomado el hábito de los juegos psicofónicos. Este «hobby» le produjo un desequilibrio serio a la par que se convertía para la paciente en una verdadera droga: «la droga de la psicofonía», tanenboga en España en estos momentos.El Dr. Ingham quiso experimentar en su propio terreno las consecuencias de la psicofon ías. Se sirvió en esta investigación de la ayuda de una psicólo-ga de primera línea. Ambos se dirigieron a un cementerio abandonado, en la noche del 21 de julio de 1976. El cementerio estaba situadoen Salísbuiy. Ambos profesionales llegaron al lugar sobre la media noche, portando un magnetofón hipersensible y casette virgen, con intención de comprobar si era verdad la posibilidad de lograr sonidos extrahumanos.

LA EXPERIENCIA ESCALOFRIANTE

Eligieron una tumba cualquiera, si bien se cuidó de registrar el año del falle -cimiento de quien yacía allí. La tumba indicada en su lápida: Sis Emmeri Dunham Wiikins, 1504-1580. El doctor Ingham preparo su magnetofón y, auxiliado por la psicóloga que le acompañaba, le colocó cuidadosamente sobre la tumba dejando que la cinta comenzara a grabar. Para evitar elempastamiento de ruidos, filtraciones de sus propias respiraciones o movimientos los dos especialistas, psiquiatra y psicóloga, se alejaron varios metros del lugar, colocándose junto a un añoso ciprés.Encendieron sus respectivos cigarrillos y esperaron aproximadamente diez minutos de grabación. Iban a moverse para transladarse hacia el magnetofón, para tratar de averiguar si había grabado algo, cuando ante la sorpresa de ambos cayeron piedras... ¡De ninguna parte ¡ La lluvia de piedras era tal, el estruendo tan angustioso, que obligó a los «experimentadores» a coger el magnetofón y salir disparados del lugar.Ya en el consultorio del psiquíatra, re-bobinarón la cinta del cassette y oyeron una voz grave, impositiva, que mas que pedir ordenaba:«LIBERARME DE MIS CADENAS, ELLAS ESTAN SOBRE MI¡ 'UBERADME...UBERADME, ESTAN SOBRE ml..lascadenas...íjí La voz,según indica el Dr. Inghm, se expresaba en un inglés muy antiguo, pero se escuchaba con absoluta claridad.La psicóloga regresó a su casa. Durante el trayecto en su pequeño coche Austin, tuvo la sensación de ser seguida... varias veces miro por el espejo retrovisor, pero nadie andaba por la carretera a esas horas. Trato de no dar importancia a la sensación. las cuatro de la madrugada, llamó el teléfono en casa del Dr. Ingham. El psiquíatra atendió seguro que era uno de sus pacientes. Al contestar oyó una voz muy áspera,, en inglés muy antiguo y presuntuoso que decía «Sir Emmery habla; vuestra presencia me ha desencadenado, aún sigo en mi celda de piedra; sin embargo mañana por la noche iré a visitarte, y si te preguntas como he logrado comunicarme telefónicamente contigo, te diré... es muy simple: el cable telefónico subterráneo pasa por debajo de mi sepultura. Mediante una conexión de orden terrestre logré comunicarme contigo. Te repito, mañana te visitaré». Ante tal anuncio y sin saber como medir las consecuencias, el Dr. Inghm y su auxiliar, la psicóloga, dejaron la ciudad por varios dfas. Al regresar, fueron directamente al cementerio de Salisbury, dónde se enteraron que allí se había producido un incendio de proporciones debido a un cortocircuito que se produjo en un cable subterráneo que pasaba bajo la sepultura de Sir Emmery Wiikins. Esta sepultura, según les informaron en el cementerio, habfa volado por los aires como si le hubieran puesto dinamita. Lo mas curioso es que junto la sepultura, volaron por los aires dos cadenas de oro de gran peso, que al parecer estaban en el interior de la sepultura y que fueron entregadas a las autoridades del lugar.Al regresar a su casa, Ingham fue informado por su portero que sobre la media noche, un hombre se presento en su casa, llamando con insistencia, era una persona mayor, de aire imponente..; el portero pensando que se podía tratar de un paciente del médico, acudió a la llamada, pero el señor en cuestión ya estaba dentro del hall de la casa de apartamentos, si bien la puerta de la calle estaba «herméticamente cerrada». El portero de la finca informó al supuesto paciente de que el médico estaba fuera de la ciudad. Abrió la puerta para darle paso y al levantar la vista, se dio cuenta de que el hombre había desaparecido...A la mañana siguiente, la policía inglesa encontró cerca de la casa del Dr. Ingham un esqueleto humano muy antiguo, cuyos restos se hallaban diseminados en un área de un metro y medio. Nadie supo explicar jamás las causas de este hallazgo. Las declaraciones del médico y la psicóloga no fueron tomadas seriamente por lo fantástico de la narración.Este hecho, con su respectiva cinta grabada, fue presentado para su estudio a un importante laboratorio parapsicoló-gico.

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OTRO HECHO SIGNIFICATIVO.

En Londres, dos jóvenes estudiantes de Arquitectura que compartían una habitación en una casa de huéspedes, resolvieron realizar un experimento psico-fónico. Los jóvenes en cuestión eran Eddy Graham y Macy Evans, de 23 y24 años respectivamente. En un parque de la vecindad grabaron varias veces, recogiendo en una de ellas el canto de un pájaro. Luego, un fragmento de una voz que parecía anunciar un producto de limpieza para el hogar. Entusiasmados, siguieron con el experimento ahora ya en compañía de sus novias y de un profesor de la Facultad, el Arquitecto Henry Hogan. En las primeras ocasiones de la grabación o bien no se captó nada o solamente se oyeron algunas voces fragmentadas, pero el 18 de Noviembre de 1978, a las 9 de la noche, grabaron una endiablada melodía de violín. Rebobina-ron y la escucharon fragmentada pero con claridad. Al día siguiente insistieron en la experimentación de psicofonías y grabaron la música completa que, sobre su final, aceleraba vertiginosamente haciéndose imposible de comprender.Al regresar a la casa de huéspedes, el magnetofón comenzó a funcionar sólo dejando oír un ritmo vertiginoso. Trataron de detener el magnetofón, pero el cassette giraba sólo y no se podía controlar el volumen. La dueña de la casa de huéspedes y los vecinos de cuarto se quejaron, y, aunque los dos jóvenes trataron de dar las explicaciones del caso de nada sirvió, debieron hacerles pasar al cuarto que ambos compartían, para que vieran con sus propios ojos que el magnetofón no se podía detener. Esto duró toda la noche, era enloquecedor, el cassette iba y venia a gran velocidad pasando la música... el magnetofón no estaba enchufado y se le habían retirado las pilas, no había forma de que generara corriente ¡Inexplicable; La dueña de la casa de huéspedes, que tenía un crucifijo, recordó que esto podía servir de «detente» y lo coloco sobre el casette a la par que decía: Descansa en paz, seas quien seas... La cinta dejó de girar y el cassette, al ser retirado por Macy Evans del magnetofón, apareció ante los ojos de todos, totalmente calcinado...
Los sonidos extrahumanos pueden llegar a desencadenar situaciones dramáticas que, en muchos casos, pueden girar al experimentador al caos mental. Una vez más, en nuestras páginas repetimos: Las psicofónias son interesantísimas, pueden servir, de información, de guía... Son un asombroso campo'de exploración, pero también, si no se está debidamente iniciados en el tema, pueden convertirse en un verdadero peligro... un arma de doble filo. Los sonidos extrahumanos pueden llegar a desencadenar situaciones dramáticas que, en muchos casos, pueden girar al experimentador al caos mental.Una vez más, en nuestras páginas repetimos: Las psicofónias son interesan-tísimas, pueden servir, de información, de guía... Son un asombroso campo'de exploración, pero también, si no se está debidamente iniciados en el tema, pueden convertirse en un verdadero peligro... un arma de doble filo.

LOS SONIDOS EXTRAHUMANOS

En boga en estos momentos el peligroso juego de psicofoníia, apasiona a neófitos y snobs, realiza desaprensivamente y sin conocimiento de las técnicas parapsicológicas.

En un viejo monasterio se captaron cantos Segovianos en Latin Arcaico es común grabar música y canciones del pasado en estos experimentos

¿QUE ES LA PSICOFONIA?

La expresión «psicofonfa» viene del griego «psyché», alma, y «phonos», sonido. Voces extra humanas, sonidos producidos por entidades del Más Allá, o voces de personas ya fallecidas. Este experimento científico, dentro del vasto campo de la Parapsicología moderna, ha sido realizado por gente curiosa, aburrida o snob que busca cómo pasar un rato de «suspense» y emoción diferente, reemplazando al viejo salón de nuestras abuelas por otra tertulia, la tertulia esotérica improvisada de salir con un grabador al campo, a las inmediaciones de un cementerio, o bien a un recinto determinado, siempre en compañía de un magnetofón, con cinta virgen, al que se deja en funcionamiento para que grabe los sonidos que hay en el espacio en ese momento. El juego de la psicofonía (cuando se trata de aficionados lo llamaremos juego) consiste, pues, como ya señalamos antes, en grabar voces no perceptibles al oído humano por poseer una vibración muy sutil y que se encuentra en octavas muy superiores a las nuestras, ya que una percepción normal no puede captarlas. Mediante la psicofonía realizada científicamente, con rigor de investigación, se pueden captar voces y sonidos cuya existencia se extinguió hace años. Cuando en Madrid o París se reúnen varios amigos.Sf piensa en la psicofonía corno un entretenimiento más, sin medir las consecuencias .Los dueños de estas voces surgen muchas veces con clara nitidez tratando de comunicarse con nosotros, en este caso con los que practican la psicofonía, ya sea científica o de aficionados. En este fenómeno parapsicológico juegan muchos elementos de la psico-trónica, se manejan y desencadenan fuerzas y hay que estar preparado para integrarse a esta experiencia; no es un mero juego. Un grupo de médicos, tres mujeres y dos hombres, intentaron en repetidas ocasiones realizar psicofonías en el llamado Campo del Moro, con consecuencias traumáticas, ya que a dos de las personas presentes se les adhirieron espíritus bajos que les perturbaron en gran manera, e incluso uno de ellos llegó a materializarse trastornando el estado emocional del improvisado investigador. En más de una ocasión, dichos elementos extra humanos se pegan al investigador psicofónico. El espacio que nos circunda, es importante destacarlo, se encuentra íntegramente poblado de seres cuya presencia no percibimos, pero cuyas voces se pueden escuchar. A nuestro alrededor pasan las voces emitidas por emisoras de radio o estaciones de T.V. que no captamos si no encendemos un elemento técnico eléctrico, como la radio y el televisor. Igual sucede en la captación de estas voces mencionadas. El deseo de estos seres de expresarse por medio de sonidos del Más Allá es continuo, de manera que donde encuentran un campo propio se presentan, y no es siempre positivo ni recomendable recibir este tipo de visitas...

¿HAY ALGUIEN AHI?

Cuando se lleva a cabo una psicoío-nía, por lo general, el sujeto actuante o quien dirige o centra la «operación», al manipular el magnetofón hace la pregunta de rigor... ¿HAY ALGUIEN AHI? A esta pregunta del agente —comu-nicador de la operación psicofónica— la primera respuesta suele ser un frió tremendo pasando junto a los cuerpos de los presentes. Luego, pequeños escalofríos... es la respuesta definitiva: si... hay alguien ahí... Se graba aproximadamente durante cinco minutos, o más si se desea... Luego, se rebobina y allí surge la voz convocada al encuentro entre csie mundo y el intermedio... Es bastante común que, luego de dos o tres minutos, hasta cinco, de grabación, se logre captar y escuchar con claridad, a veces mediana o algunas veces nítida, una voz, voces, cantos o ruidos... Debemos consignar como punto aclaratorio que la velocidad con que se expresan, la rapidez, es la caractestica primordial de una psicofonía. Estas entidades, como ya se sabe, contestan desde otra dimensión, donde la relación tiempo más espacio no existe; de ahí la velocidad exorbitante con la que llegan las respuestas, que son difíciles de entender, salvo luego de repetir la grabación varias veces o lograr pasarla en una velocidad menor de la normal.

EL PELIGRO DE TENER MEDIUMNIDAD NEGATIVA Y ATRAER MALOS ESPIRITUS

Por lo general, las entidades del Más Allá que responden a las llamadas, son espíritus de naturaleza baja, conocidos como espíritus «elementales», de tierra, fuego y aire. Estos pequeños seres espirituales adquieren muchas veces formas humanas. Son lo que de negativo posee el mundo de lo invisible o mundo paralelo o intermedio.En muchos casos, cuando alguno de los asistentes no posee una me-diumnidad elevada, sino que es un espíritu débil o de mediumnidad negativa, estos espíritus «se pegan» a los integrantes de la sesión psicofónica y continúan perturbándolos y martirizándolos durante varios días. Hubo casos en que estos seres del Más Allá mantuvieron su contacto con el investigador, fastidiándolo durante el día y la noche, provocándole sensaciones de que alguien le pasaba una tela de araña por el rostro, produciendo ruidos en la casa, o dejándose oír confusamente o con claridad, según el caso, sin la ayuda del magnetofón, en contacto auditivo directo. Hay casos también en los que, en realidad, no se grabó una voz del espacio, sino nuestro propio pensamiento, que, en su intensidad de ondas, produjo sonido captable.

ALGUNOS CASOS DEPSICOFONIAS

En Inglaterra ocurrió un caso que fue ampliamente difundido. Sucedió en el año 1949 en Wiltshire. El hecho se desarrolló en la casa de la familia Ma-cey, un viejo e imonente caserón que por el año 1470 había sido un monasterio de monjes católicos. El capitán Roland Macey compró el viejo monasterio abandonado y lo convirtió en una comodísima casa «al buen estilo de vida inglés», y allí se traladó con su familia, compuesta por su esposa, cuatro niños y varias personas de servicio (cocinera, jardinero, niñeras y una mujer de limpieza). Todos ellos fueron testigos de la anécdota sobre psicofonías que relatamos: Los niños del capitán Macey senan predilección por jugar en una habitación superior de la casa, que tenía forma de torre y que, si bien estaba acondicionada como cuarto de juegos o «nursery», mantenía cierto clima de vieja torre conventual. Una tarde, durante la merienda, los niños alegaron que preferían jugar en la torre en lugar de hacerlo en el parque ya que, mientras ellos jugaban, un coro les cantaba alegres canciones o cosas parecidas a las oídas en la Iglesia. La madre no prestó mayor atención a lo que comentaban los niños, atribuyendo el relato fantástico a la natural tabulación de los chicos. Habían pasado varios meses cuando llegó de visita a la casa el Pastor de la Iglesia Episcopal del lugar, fe que practicaba la familia Macey. ' Los niños, luego de tomar su clásico te de las cinco, pidieron permiso a su madre para ir a escuchar a «los señores que cantan en- la forre»... Al Pastor le pareció divertido el juego de los niños y se ofreció para ir con ellos a escuchar a los señores que cantaban...El Pastor y la madre de los niños subieron con los chicos a la torre y, al cabo de unos minutos, mientras los chicos jugaban con absoluta naturalidad, comenzó a oírse en forma lejana y vaga, hasta llegar a un claro primer plano, un canto gregoriano totalmente arcaico y en latín. El presbítero y la señora Macey trataron de averiguar de dónde provenía ese sonido sin resultado alguno. El Pastor recordó entonces que hacia 400 años esa casa, reconstruida con gusto funcional, había sido un viejo monasterio. Durante varios días, el matrimonio Macey y el presbítero repitieron la experiencia... las voces continuaban con sus cantos gregorianos e incluso se llegaron a oír letanías... Esto llevó al matrimonio Macey a realizar consultas con personalidades del medio parapsicológico de Inglaterra, avalados por el testimonio del Pastor. Diversos expertos de la Biofísica moderna realizaron estudios en el lugar de los sucesos. Todos oían con claridad los cantos gregorianos, que además fueron grabados en magnetofón, como testimonio de la más patente psicofonfa. Los expertos revisaron de cabo a punta la torre, desarmaron muebles, estanteas, columnas, etc., y, finalmente, descubrieron una vieja y destartalada mesa-escritorio, con doble fondo, donde se guardaba un crucifijo de piedra cuya edad oscilaba los quinientos años... Se quitó el crucifijo del lugar, se colocaron distintos magnetófonos en la habitación, junto al escritorio y al crucifijo, y se comprobó que la música venía del crucifijo. En esta experiencia parapsicológica, auténtica investigación psicofónica, se logró captar en cinta magnetofónica cantos gregorianos, arias, letanías y hasta una misa entera, celebrada en latín arcaico. Se había realizado todo un experimento psicofónico en el campo psicotrónico.

OTROS DOS CASOS: NEGATIVOS-POSITIVOS

En la casa de campo de los señores Dias Ventura do Branco, la dueña de la casa, doña Ruth Elisette, recibió la visita de una amiga inglesa, compañera de estudios. Su amiga Bárbara Graham, de 31 años, estaba estudiando Parapsicología y una noche, luego de la cena, propuso a su amiga Ruth Elisette, que, llevando al jardín de la mansión de los Dias Ventura do Branco un magnetofón, intentaran una psicofo-nía... Ambas mujeres esperaban recoger voces antiguas, quizá de aquéllos que llamaron a la región Lusitania, o bien del paso de los moros por allí, pero no... Durante varios días intentaron realizar la prueba sin éxito; al cuarto día, las acompañó el dueño de la casa, un médico amigo y el hijo mayor del matrimonio, y se produjo la psicofonía. Al rebobinar la cinta del magnetofón oyeron con claridad una voz que tanto hablaba inglés americano, como en portugués, a gran velocidad, y que decía que se le había impedido dedicarse a lo suyo... y comenzaba a cantar un tema de jazz de los años veinte, con ritmo. La música aceleraba y se convertía vertiginosa. Volvieron a grabar y la voz iemenina, que hablaba mezclando los idiomas, les agredió primero, gimió después, clamó por volver a cantar jazz... y desapareció. Intentaron nuevas manifestaciones de la entidad, pero no volvieron a lograrlo. Después de 48 horas, aproximadamente, comenzaron ' a oírse golpes extraños en el comedor de la casa y ruidos de puertas que se abrían y cerraban. Durante dos noches todos los de la casa oyeron un ruido clasimo en un corredor donde estaba situado el tocadiscos. La última noche, el plato del mismo comenzó a girar sólo en forma vertiginosa; insistieron en la psicofonía y volvieron a grabar; aullidos primero, voces confusas, y un tema de jazz enloquecedor por su exagerado ritmo y velocidad. Durante toda una semana no se produjeron más psicofonías, pero persistían los ruidos extraños. Una experta amiga de Bárbara, consultada desde Cintra (Portugal) por vía telefónica a Londres, aconsejó suspender las prácticas, guardar como testimonio las cintas y «descargar» de fluidos y presencias inferiores la casa del matrimonio Dias Ventura do Branco. Todos se concentraron deseando paz para el espíritu o entidad convocado en la experiencia. Se roció con agua bendita la casa, se quemó incienso y se enviaron a un laboratorio de investigación parapsicológica las cintas grabadas. Los ruidos desaparecieron. Esto sucedió hace dos veranos en Cintra. En Brasil, en la ciudad de Porto Alegre, tres jovencitas de 17 años intentaron la experiencia y lograron captar voces de viejos esclavos que mantenían una conversación fragmentada, y luego, una voz femenina con sonido casi de trino que repea: «Niñas, volved a casa... no perturbéis, no hagáis esto, volved queridas, volved...» La psicofonía es como caminar sobre el filo de la navaja. En nuestro próximo fascículo nos ocuparemos de un caso escalofriante sucedido a un médico psiquíatra en el año 1976, y de un hecho, de apariencia positiva, acaecido en abril del 79 en Barcelona.