LAS INQUIETANTES REVELACIONES DEL
ASTRONAUTA EDGAR MITCHELL
Por Antonio LAS
HERAS
El capitán y
doctor Edgar Dean Mitchell participó del viaje de la Apolo XIV, fue el
séptimo hombre que caminó por la polvorienta superficie selenita y realizó
experimentos parapsicológicos desde el espacio. Retirado de la astronáutica,
fundó el Instituto de Ciencias Noéticas, con sede en California,
especialmente dedicado a la investigación de las capacidades psíquicas,
parapsicológicas y espirituales humanas. Visitó la Argentina varias veces.
En setiembre de 2000, él y yo nos reunimos en Buenos Aires, con total
privacía y tiempo suficiente, una tarde de domingo para conversar sobre
Parapsicología, Control Mental y el fenómeno ovni. Lo que sigue es la
transcripción de lo que dialogamos sobre los visitantes extrahumanos. Se
trata de un diálogo que no requiere aclaraciones. Solamente es necesario
atreverse a analizarlo haciendo inteligencia. (Inteligencia: análisis
racional de toda la información disponible.) Así entenderemos la verdadera
trama humana dedicada al ocultamiento de la presencia de entidades
biológicas extraterrestres inteligentes en nuestro planeta.
A.L.H.: Para comenzar con el tema de los ovnis... El lunes 17 de abril de
2000 el diario La Nación, de Buenos Aires, publicó una carta firmada por Ud.
donde se lee: "En mi carácter de piloto del módulo lunar, misión Apolo XIV,
y control de Tierra, misión Apolo XI, desmiento categóricamente la
autenticidad del video transmitido en la emisión del programa de la Sra.
Susana Giménez, el viernes 7 del actural. El mencionado video presenta a los
astronautas Armstrong y Aldrin teniendo un encuentro con seres
extraterrestres en la Luna en 1969. Este material, presentado por un señor
Sixto Paz Wells, que adujo haberlo conseguido de la NASA a través mío, es un
absoluto fraude. No ha habido encuentros de astronautas con vida
extraterrestre en la Luna. El tape no pertenece a la NASA y yo jamás tuve
contacto con quien me cita como fuente de información".
En base a esto quiero conocer si Ud. o sus colegas han visto en el espacio
cosas que se puedan llamarse objetos voladores no identificados.
E.M.:
No. Ni yo, ni ningún astronauta en el programa Apolo observó en el espacio
ni naves, ni seres extraterrestres.
No puedo referirme acerca de lo que vieron o no los astronautas del
transbordador porque no hablé con todos ellos. Pero antes de que los
transbordadores estuvieran en servicio, inequívocamente puedo decir que
ninguno de los astronautas vieron seres o ni naves extraterrestres, Con
todos ellos hablé personalmente.
Sin embargo, aviadores de la Fuerza Aérea estadounidense sí vieron ovnis;
pero no como astronautas. Se trata de aviadores militares que, después,
fueron astronautas. Durante el período en que fueron jóvenes aviadores de la
Fuerza Aérea si vieron ovnis y hasta los persiguieron...
A.L.H.:
Mientras estaban en su tarea de aviadores en actividad?
E.M.:
Si, muchos pilotos; no sólo los de Fuerza Aérea tuvieron esa experiencia.
A.L.H.:
Por su experiencia y lo que conoce de estos temas, ¿piensa que algunos de
esos ovnis pueden ser vehículos extraterrestres creados por seres de otros
mundos?.
E.M.:
Es una respuesta muy larga a la que no se le puede decir si o no. Es un
fenómeno muy complejo y resulta muy difícil dar una respuesta porque en
realidad todavía no hay una respuesta afirmativa o negativa. La hipótesis de
la existencia de seres extraterrestres es cada vez más fuerte y cada vez hay
más evidencia que la sostiene. También hay evidencia de que algunas de las
naves que fueron consideradas como vehículos extraterrestres son tecnología
muy exótica llevada a cabo por humanos, derivada de conocimientos que
extrajeron del avistamiento de naves extraterrestres.
A.L.H.:
Bueno, si estos conocimientos están basados en naves extraterrestres,
implicaría la real presencia de esos visitantes extraterrestres - al menos -
en nuestra atmósfera.
E.M.:
Si, el problema es lo que es de dominio público versus lo que es de archivos
secretos clasificados. Y aún es más complejo que eso, que es la
departamentalización de una cosa versus la otra. Nosotros decimos los
gobiernos deberían saber, pero los gobiernos de hoy en día - el argentino,
el francés, el norteamericano, etc. y muchas de las personas que están hoy
en día en el gobierno - tampoco saben sobre esto. Parecería que hay un grupo
secreto - una logia muy cerrada - escondido dentro mismo de la estructura
gubernamental de los países y ellos son los que tienen el conocimiento y la
evidencia.
A.L.H.:
Se me ocurre una cosa: el eje de la película Día de la Independencia está
basado en esto; en un momento en que - en la ficción - el mismo presidente
de los EE.UU. se sorprende porque alguien - de un servicio de inteligencia -
le informa que tienen escondido un vehículo extraterrestre caído en el
desierto hace treinta años...
E.M: Eso que Ud. señala, que hasta el mismo presidente se
sorprende, puede ser que en ese aspecto sea verdad. Lo que no hay evidencia
es que estos seres sean hostiles como lo muestra esa película. No hay
ninguna evidencia que resulten alguna amenaza para la Humanidad.
A.L.H.:
En realidad parecería justamente todo lo contrario. Que son por lo menos
neutrales si hace tiempo que están aquí y no nos ha perjudicado.
E.M.:
Sí. Estoy de acuerdo. Si nosotros los humanos descubriésemos otra
civilización, estaríamos más interesados en observar que en intervenir.
A.L.H.:
Pienso que como somos los humanos, querríamos intervenir, olvidándonos de
aquello de que hay que hacer observación no participante.
E.M.:
Yo prefiero la hipótesis que mostraba la serie ´Viaje a las Estrellas´... De
cualquier modo hay que tener en cuenta que la gente que viaja al espacio
está entrenada para ser más generosa y mantener otra actitud...
A.L.H.:
Que el común de la gente... Pero volviendo a la película ´Día de la
Independencia´... ahí se trabaja con la suposición de que algún servicio
secreto de inteligencia de los EE.UU. tiene los restos de un vehículo
extraterrestre... ¿Esto puede ser cierto?
E.M.:
Parecería que este grupo o logia enquistada dentro de los gobiernos puede
llegar a tener a esto, pero no tenemos evidencia externa. Tenemos que ver la
historia con la perspectiva de 60 a 70 años hacia atrás, para poder entender
porque surge todo este fenómeno de encubrimiento, Tenemos que pensar que el
período moderno empezó después de 1947, eran los finales de la Segunda
Guerra Mundial y las fuerzas militares norteamericanas, no sabían si esto
podía ser soviético o alemán o que cuando llegaron a la conclusión de que
podía llegar a ser extraterrestre tuvieron miedo de revelarlo porque se
daban cuenta de que el gobierno no tenía los medios ni las herramientas para
proteger ni a los EE.UU., ni a cualquier otro país, de una invasión
extraterrestre. Siendo así la primer reacción fue negar todo y eso comenzó a
producirse como un barril sin fondo muy burocrático, un agujero sin fondo
que se ha perpetuado hasta nuestros días. La gente se pregunta como pudo ser
cubierto durante tanto tiempo. Pero no ha sido cubierto. Hay evidencia en
todos lados de que existe. Así que ese encubrimiento es un encubrimiento
parcial. Pero es una táctica de inteligencia clásica negar, decir que eres
un tonto si crees en esto, usar lo que se llama desinformación que significa
tomar un poquito de verdad y poner un montón de cosas falsas en ello. Así
que la táctica fue negar, negar y negar; y en 50 años se va hundiendo,
hundiendo, hundiendo, y se vuelve tremendamente confuso y difícil llegar a
ese meollo de aquel momento. Parecería que desde Eisenhower y John Kennedy,
(probablemente Eisenhower y Kennedy supieron la verdadera historia o por lo
menos parte de la verdadera historia) ningún presidente después de ellos
tuvo acceso a esa información y se ha convertido en algo totalmente oculto y
secreto, de lo cual no es solo responsable el gobierno que está muy
controlado.
El gobierno no construye nada. Por lo tanto tuvo que haber industriales en
esto. Probablemente esos mismos industriales, que como todo esta muy
compartimentalizado, ni siquiera ellos saben lo que están haciendo. Pueden
estar construyendo una parte, pero no saben que uso puede llegar tener eso
en la estructura completa.
Yo no puede probar que esa sea la historia. Es una hipótesis. Pero toda la
evidencia parece señalar que ésta hipótesis refiere a lo que realmente
ocurrió. Pero yo tengo pruebas que permiten señalar que esto fue esta manera
y no de otra. Y fundamento estas conclusiones en mi privilegio de haber
podido hablar con personas que en estos años estuvieron en el lugar, que
estaban en el gobierno y en el servicio de inteligencia o con los militares
y su trabajo era saber. Muchos de ellos son ahora personas muy grandes, y
quieren contar su historia antes de morirse. Pero todavía están bajo
juramento y se hallan muy vigilados. Tendrían consecuencias muy serias si
hablan, ya que no pueden decirlo abiertamente. Algunas personas conocidas
estuvieron poniendo presión sobre el Congreso, para poder tener audiencias
públicas donde estas personas pudieran hablar abiertamente con inmunidad en
el Congreso con estas cuestiones, pero no ha pasado todavía.
A.L.H.:De
acuerdo con lo que Ud. investigó y ha estudiado, ¿cuál es su opinión sobre
el incidente Rooswell?. Pregunto su opinión personal al respecto.
E.M.:
Como no estuve allí, no tengo información de primera mano. A pesar de que yo
vivía en Rooswell cuando acontecieron los hechos. Era joven. Tenía 17 años
cuando el incidente ocurrió. Sólo sé, por haber hablado con investigadores y
personas adultas que en aquel tiempo estaban afincadas en esa zona.
Unicamente en los últimos siete u ocho años decidí investigar personalmente.
La evidencia me dice que sí, que existió el accidente de un vehículo
extraterrestre y que se recuperaron cuerpos.
A.L.H.:
Esto podría haber pasado en alguna otra parte del mundo.
E.M.:
Pasó en otras partes del mundo. Sólo en los EE.UU., al parecer, hubo dos o
tres accidentes de vehículos espaciales extraterrestres. También parece que
sucedió en otros lugares del mundo. Pero yo he conversado, en profundidad,
sólo con investigadores norteamericanos y no de otros países. Pero tengo el
conocimiento por conversaciones superficiales con investigadores de otras
naciones que sí hay evidencia de incidentes similares en otros países.
Sabemos que el avistaje de ovni es algo que sucede en todo el mundo.
A.L.H.:
Si, pero parece que lo que no sucede en otras partes del mundo son los
accidentes y esto es lo más interesante porque ahí habría evidencia
irrefutable.
E.M.:
Aparentemente hubo otros accidentes en otros lugares. No demasiados.
A.L.H.:
En la comunidad científica hay un prejuicio, una reticencia, a hablar de
este tema, a investigar ovni, ¿por qué cree Ud. que está tan acentuada esta
tendencia?
E.M.:
Es difícil hablar de la comunidad científica como un conjunto monolítico. La
comunidad científica es una estructura como el gobierno, con muchas facetas.
Hay muchas formas de contestar a tu pregunta.
El conocimiento científico, desde Einstein y la relatividad en este último
siglo, este modelo no podía concebir que existiera vida en otra parte del
Universo, y si podían llegar a existir ¿cómo podían viajar?. En ese modelo
científico era inconcebible, no había ninguna teoría científica de como esto
pudiera ser posible. Era fácil para la comunidad científica - entre comillas
- aceptar la negación del gobierno y decir no, está bien, no.
En los últimos veinticinco años este modelo cambió mucho. Los científicos
jóvenes están desafiando muchas de las ideas antiguas. Ya no es más
considerado loco el que piensa que puede haber vida en otro planeta, en otra
galaxia. Algunos científicos consideran posible el viaje a través del
espacio; pero todavía - debido a la negación y supresión de información por
parte del gobierno - hace que exista una sonrisa irónica en la comunidad
hacia todo lo que tenga que ver relación con los ovni, parece tonto. Pero
eso esta cambiando.
A.L.H.:
¿No es llamativo que los aviadores en la atmósfera terrestre hayan tenido
muchas observaciones de ovni y que los astronautas de acuerdo a lo que Ud.
ha dicho no hayan tenido ninguna?
E.M.:
No, porque las naves espaciales tienen muy poca visibilidad hacia afuera,
hacia exterior. En cambio, cuando estás en un avión de guerra todo el techo
está abierto; pero en una nave espacial sólo hay una ventanita, muy
chiquita, así que a menos que ese avistamiento esté en ese ángulo de
visibilidad, nunca lo verás. Además en la mayor parte de una misión espacial
estás ocupado con los instrumentos del panel de control. Casi no hay tiempo
para mirar hacia afuera, eso hace que no sea sorprendente. Recuerda que el
ojo solo puede percibir cosas que se hallan a unos cientos de millas. Sí,
vimos objetos no identificados, pero luego todos fueron identificados.
Podemos ver cosas que no sabemos lo que son, pero después de un buen trabajo
detectivesco, las identificas. Pero ningún cosmonauta ni astronauta tiene
evidencia de haber visto un ovni.
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